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Kiko reaparece a sus 78 años en un circo y es criticado por seguir trabajando.

El chavo del 8 fue una de las producciones mexicanas más exitosas a nivel mundial.

Dicho programa no solo se transmitió en países de habla hispana, si no que llegó a transmitirse en Japón con todo y doblaje.

El éxito del programa es indiscutible, pues se repitió en las televisoras durante varias generaciones, impulsando la creación de una serie animada y varios videojuegos.

Con el paso de los años los actores de la serie siguieron por caminos separados buscando el éxito de manera individual.

Tomemos como ejemplo a María Antonieta de las Nieves como la Chilindrina o Carlos Villagrán en su papel de Kiko

(dejemos de lado el pleito que se aventaron por los derechos de autor).

Este último ha viajado alrededor de Latinoamérica por más de 50 años con su espectáculo.

Sin embargo, su presentación en Tegucigalpa, Honduras, despertó los comentarios negativos en redes sociales por seguirlo haciendo a sus 78 años.

 

 

En el clip vemos a Kiko sacando los prohibidos y aunque para algunos fue algo divertido, para otros fue el claro ejemplo del “Cuando no te retiras a tiempo”.

Ejemplo de la importancia de ahorrar para la vejez’; ‘Prefiero quedarme con el recuerdo de la tele’; ‘El mismo Roberto Gómez dijo algún día, ‘Ya estoy viejo para interpretar a un niño de ocho años’ y lo jubiló a tiempo. Esto es no querer envejecer dignamente’; ‘Está destruyendo mi infancia’; ‘Con esto nos podemos dar cuenta de que el mayor enemigo de todos es el tiempo’.

Aunque no todo fue negativo, pues también hubo comentarios positivos que remarcaban su entrega con el personaje y sobre todo la habilidad del hombre para moverse de esa manera a su edad. El paso que presentó es el mismo con el que Neymar da Silva Santos Jr. celebra sus goles, que Villagrán le enseñó.

Es como ver a Mick Jagger o a Paul McCartney tocando’; ‘Es de los mejores, a pesar de su edad, sigue con energía y carisma que siempre mostró con su personaje, la gente prejuiciosas dijo muchas cosas’; ‘Si yo hago eso, me voy a terapia por tres meses’; ‘Está arrugado, pero en espíritu es el mismo de siempre’.