El video del peculiar accionar de ‘Sunny’ se volvió viral en Facebook y otras redes sociales, desatando innumerables comentarios entre los usuarios.
Quienes tienen un hijo saben que su seguridad es lo más importante. Por eso es común la instalación de cámaras de videovigilancia para mantenerlos seguros durante las noches y madrugadas; sin embargo, una madre en Estados Unidos nunca imaginó que este dispositivo registraría una tierna escena que no solamente la tomó a ella y a su familia por sorpresa, sino también a los usuarios de Facebook. Conoce a continuación esta historia que ha conmovido a todo Internet. Te llevarás una gran sorpresa.
El protagonista es el pequeño Sunny, un gato que pasó la mitad de su vida en un refugio antes de que Shannon Richardson lo adoptara. “Pasó seis años de su vida buscando un nuevo hogar y tan pronto como lo conocimos tuvimos que adoptarlo”, manifestó la mujer al portal The Dodo.
El felino parecía no tener inconvenientes en adaptarse a su nuevo hogar; no obstante, todo cambió con la llegada de su ‘hermana’ humana Hazel. La curiosa historia se viralizó en Facebook.
Cuando trajimos a Hazel por primera vez, no la quería mucho”, dijo Richardson. “Dejamos el portabebés y lo olió, luego se alejó y se fue a cenar».
Sunny pasó muchos meses tratando de dejar en claro que no era fanático de Hazel. Sus padres se preguntaban si el gato alguna vez se acercaría a su ‘hermana’, pero los días pasaban y el animal parecía negarse a aceptar que había dejado de ser el centro de atención de su hogar.
Debido a lo anterior, grande fue su sorpresa al revisar el monitor de seguridad del bebé, sorprendiéndose al notar que el minino se había ‘infiltrado’ en la habitación de la niña. Luego se acurrucó junto a ella y se puso a dormir. Ingresa a este enlace para ver el tierno momento registrado en video.
“Esta fue su primera siesta con ella”, dijo bastante emocionada Richardson. “Me sorprendió mucho verlo en la cuna. No hay una manera fácil de subir sin saltar bastante lejos, y realmente no le gusta saltar. ¡Se quedó allí durante cuatro horas antes de que mi esposo se diera cuenta de que no había vuelto a la cama con nosotros!”, agregó.
Según parece, Sunny sentía cariño por Hazel, pero no estaba listo para mostrarlo.
Los días pasaron y el gato empezó a demostrarle a todos que quería a Hazel. Ahora, es normal verlo atento cuando la niña llora, tratando de asegurarse que esté bien e incluso le gusta acurrucarse con ella cada vez que tiene la oportunidad.
Puede que el inicio de su relación de ‘hermanos’ no haya sido el mejor, pero Sunny y Hazel ahora están en camino a convertirse en los mejores amigos. No cabe duda que el gato estará a su lado en la mayoría de siestas que la niña tome.
Fuente: https://mag.elcomercio.pe/