James Flores, residente de Nuevo León, canceló su compromiso y encontró una pareja que le compró todo lo que había contratado para la ceremonia.

Recientemente un joven mexicano de Monterrey llamó la atención de los medios locales luego de vender todo lo de su boda por Facebook.

El paquete que había contratado con una organizadora de eventos para su boda fue cedido a otra pareja, pues James Flores canceló su compromiso con su novia.

Él buscaba una madre para sus tres hijos y desde su perspectiva, la mujer de la cual estaba enamorado no quería a sus niños y tampoco quería ayudarlo a cuidarlos.

Cuando James se percató de esto, descubrió que ella no era la persona indicada para convertirse en su esposa. Al romper el compromiso, tuvo que vender el paquete comprado para la boda.

Este incluía un espacio para 200 personas, un menú a dos tiempos, refrescos y otras variedades para sus invitados.

Todo le costó poco más de 4,327 dólares estadounidenses, pero para poder recuperar algo de su dinero lo más pronto posible, tuvo que reducir su precio a 3,019 dólares. Afortunadamente logró dar con otra pareja que quiso comprar su ceremonia antes de que llegara la fecha. James les deseo la mejor de las suertes.

Aquellos que se encontraron con la publicación en Facebook no dudaron en preguntarle la razón por la cual había cancelado su evento.

Fue ahí que James les explicó, a través de varios videos, que su prometida “no quería atender a sus hijos” y por eso rompió con ella.

 

Dijo que aún la ama, pero que ella no lo apoyaba en la crianza de sus hijos. Acusó que no les daba la atención que él como padre quería ver en la mamá de sus pequeños.

“Si no quiere a mis hijos yo no puedo aceptar casarme con ella.

Yo la quiero mucho, la amo y la respeto, pero como mamá para mis hijos no es la persona que yo quiero. (…) Mis hijos son primero y prefiero quedarme como papá soltero” declaró James Flores.

Sin embargo, a pesar de que él contó su historia con la mejor de las intenciones, muchos internautas le dejaron comentarios negativos y críticas.

Algunos argumentaron que ella no tenía que tener responsabilidad sobre hijos que no eran de ella.

Otros tantos dijeron que lo que él buscaba no era una esposa, si no una niñera.

No podemos conocer cuáles eran las verdaderas intenciones de este chico con su prometida.

Mientras que hay quienes argumentan que la mujer se debe quedar en casa a cuidar a los niños, hay otros tantos que saben que muchas mujeres no desean esto para sus vidas.

Pero lo que podemos afirmar es que para James, sus hijos vienen en paquete con él.