Las pequeñas McKinley, Lauren, Ava y Chloe, de entre 4 y 5 años, se conocieron en 2015 en el hospital para su tratamiento y formaron una amistad cuando se vieron todas calvas. Se apoyaron en todo el proceso.
En 2015, McKinley, Lauren, Ava y Chloe recibían tratamiento contra el cáncer. Las tres primeras tenían leucemia linfoblástica aguda, y la última una forma rara de cáncer de pulmón. Cuando vieron sus cabezas totalmente calvas, se convirtieron en grandes amigas.
Durante su agotador tratamiento, las pequeñas confiaron entre ellas para obtener apoyo y amistad, y esta semana las valientes se reunieron en el hospital Johns Hopkins All Children’s en Florida, para una foto.
Las niñas, todas entre cuatro y cinco años, se toman una foto cada año en el vestíbulo del hospital, casi como una tradición. Pero esta vez había algo especial: todas habían vencido el cáncer.
«Todos estaban en tratamiento activo la primera vez que lo hicimos(tomar la fotografía)», dijo la madre de Ava, Alyssa Luciano, a FOX13. «Es increíble ver lo lejos que han llegado, de ser pequeños bebés calvos», agregó.
La felicidad se refleja en sus ojos y rostros. ¡Lucen realmente hermosas!
La madre de McKinley, Karen Moore confesó que: «Siempre fue un soplo de aire fresco ver una cara familiar y saber que ella no estaba sola en esto».
Es que el tiempo que pasaban en el hospital hizo que no solo se afianzaran como amigas, sino que también como una gran familia. Las madres dependían unas de otras para pasar el tratamiento.
«Solo el hecho de haber tenido otras madres con quienes relacionarnos ha sido fenomenal, solo para que otras personas lo atraviesen al mismo tiempo que nosotros», comentó Karen.
La última en completar el tratamiento con éxito, fue Lauren, a principios de este mes. Su madre, Shawna, dijo: «Hemos terminado. Tocó el timbre para indicar que ha completado su tratamiento (…) irá a la guardería el lunes. Han llegado tan lejos, todos».
Fuente: http://www.upsocl.com/