Holanda, como es bien sabido, es uno de los países más comprometidos en materia medio ambiental.
Ahora, un proyecto holandés ha servido para recuperar la vida silvestre del lago Markermeer, una zona que necesita renovar su ecosistema debido a la contaminación.
Todo esto se ha decidido hacer a partir de la creación de cinco islas artificiales en una especie de restauración de la naturaleza del continente. Bien lo afirma el guardabosque Donker, que ha vivido muy de cerca todo el proceso.
Anteriormente, el lago Markermeer formaba parte de Zuiderzee, una zona aislada del Mar del Norte. Su ecosistema sufrió graves consecuencias tras la construcción del dique de cierre denominado Afsluitdijk.
Previamente a dicha construcción, la zona solía regular el nivel de agua del resto del país y ser rica por la biodiversidad de su ecosistema. Sin embargo, en la actualidad no contaba con vida acuática.
Es cierto que el dique es primordial para la supervivencia del país, pero también ha sido mortal para el medio ambiente. Por ello, se ha decidido llevar a cabo este apasionante y bonito proyecto.
Holanda, orgullosa de este proyecto apasionante
De las cinco islas construidas, la principal está abierta al público. En ella, además, se han construido tres observatorios de pájaros. En cambio, las otras cuatro están reservadas exclusivamente a la preservación de la flora y fauna de la zona.
Los encargados de realizar las islas están entusiasmados, ya que han conseguido cumplir su objetivo en tan solo dos años de trabajo. Ahora, la zona ha vuelto a recuperar su ecosistema anteriormente perdido y vuelve a ser rica en vida acuática, además de haber podido mantener el dique necesario para el país.
Este tipo de proyectos que inyectan esperanza en el medio ambiente es una práctica que se debería adoptar en todos y cada uno de los países del planeta para preservar y proteger las especies tanto de animales como de plantas de la total desaparición.
Fuente: https://www.ilusionviajera.com