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HBO no entiende el amor de fans por el príncipe Daemon en House of the Dragon. Es grosero y abusador

“Se ha vuelto el novio del Internet de una forma que me desconcierta.

No porque Matt no sea increíblemente carismático y maravilloso, es asombroso en el papel.

Pero Daemon en sí es… no quiero que sea mi novio”, afirmó Sara Hess, guionista de la serie.

El éxito de “La casa del dragón” tomó a algunos por sorpresa, pues luego del decepcionante final de “Game of Thrones”, los fanáticos no tenían demasiadas esperanzas. Un actor que ha destacado desde el principio es el intérprete del príncipe Daemon Targaryen, Matt Smith. Este último ha dejado a varios sin aire, pues lo consideran muy guapo y atractivo.

En una entrevista con The Hollywood Reporter, la guionista de la obra audiovisual, Sara Hess, admitió que no entiende por qué el personaje de Daemon ha causado tal furor.

Si bien destaca el carisma y talento del actor, menciona que el personaje en sí no es uno que a ella le parezca una buena pareja:

Se ha convertido en el novio del Internet de una manera que me desconcierta.

No es que Matt no sea increíblemente carismático y maravilloso, es asombroso en el papel.

Pero Daemon en sí es… ¡No quiero que sea mi novio!

Me sorprende cuando todos dicen ‘Oh, papi’, yo digo.

‘¿De verdad? ¿Cómo, de qué manera ha sido una buena pareja, padre o hermano para cualquier persona?’

La verdad es que yo tampoco entiendo qué le ven: el hombre tiene una relación incestuosa con Rhaenyra, su sobrina, que además partió cuando la joven era menor de edad.

Por si eso no fuera poco, también asesinó a su propia esposa.

Sin embargo, la audiencia ve en él a un hombre dispuesto a tomar riesgos, con una sonrisa pícara, un gran guerrero y muy apuesto.

En ese sentido el actor, Matt Smith, calza perfecto para el papel, pues es un hombre encantador, simpático y bastante atractivo.

Esto no ha pasado nada desapercibido y ya se puede ver la reacción que ha suscitado con parte del público, quienes no temen en describirlo como de ensueño.

Definitivamente esta no es la primera, y tampoco será la última vez, que el público termina por adorar a un personaje “malo”.

Por ejemplo, está el famoso caso de “Breaking Bad”, en donde a pesar de que Walter White era presentado como un hombre que terminó consumido por su propio egoísmo y quien llegó a cometer actos horripilantes, de igual forma la gente lo apoyaba.