Si eres una mujer lectora, bien por ti. La lectura es una gran forma de entretenimiento y aprendizaje, pero además es una gran herramienta para desarrollar todo tu potencial.
Un buen ejemplo de esto es Margaret Fuller. Ella fue una periodista importante, nacida en 1810, que logró llegar a la redacción de un periódico importante (el New York Tribune) en tiempos en los que era raro que las mujeres llegaran allí. Además dedicó gran parte de su vida a ser activista de los derechos de la mujer.
Una de sus grandes frases es: “Hoy un lector. Mañana un líder”. Y es que ella era las dos cosas y entendía perfectamente cómo ambas, aparentemente inconexas, están íntimamente ligadas.
Estos son algunos de los motivos por los que las mujeres que leen ven potenciadas sus capacidades de liderazgo.
La lectura abre tu mente
Leer hace que entren en tu cabeza nuevas y grandes ideas y, tal como decía Einstein, “La mente que se abre a una nueva idea, jamás volverá a su tamaño original”. La lectura permite imaginar cosas que otras personas jamás pensarían.
El cerebro no deja de ser un músculo, y como tal es necesario entrenarlo para que sea flexible y abierto. La lectura es un ejercicio espectacular para ello.
La lectura fomenta tu creatividad
La innovación y la creatividad son dos herramientas necesarias para una líder. Si eres una persona informada, estarás siempre al tanto de las nuevas tendencias y sobre todo, tendrás el entrenamiento necesario para poder identificar rápidamente el potencial de las cosas. Además, te permite mirar las cosas desde perspectivas completamente innovadoras.
Eso permite que puedas resolver mejor los problemas, evitar que las cosas salgan mal y estar siempre a la vanguardia de las ideas.
La lectura mejora tu comunicación
No cabe duda de que para ser buen líder es fundamental tener buenas competencias comunicativas. Cuando diriges un grupo humano, lo más importante es que todo el mundo te comprenda. Pero además, que te siga.
Una buena lectora sabe perfectamente cómo usar el lenguaje, cómo ser clara pero no severa, cómo hacerse respetar sin resultar odiosa. Todo eso convierte rápidamente a una mujer en una líder.
La lectura mejora la empatía
Para ser líder, es importante ponerse en el lugar del otro. Pero es más que eso: se trata de entender por qué las personas hace lo que hacen, qué las motiva, qué las entristece, cómo son sus almas.
Los personajes de nuestros libros favoritos son los mejores profesores respecto a esto. Al leer, nos metemos por un rato en la cabeza de otras personas, y eso es un gran entrenamiento para mejorar la empatía y entender cómo funciona la gente.
Y además de todo esto, la lectura ayuda a que te relajes después de un largo día de trabajo, pone en marcha tu cerebro y te hace feliz.
¿CÓMO NO VAS A SER UNA GRAN LÍDER SI ERES UNA GRAN LECTORA?
Fuente: https://www.bioguia.com/