La clase media es el lugar donde una buena parte suele ubicarse respecto de la situación socioeconómica del país que habitan. Poca gente se considera “pobre” al igual que millonaria. Poseemos la errónea creencia de que la gran mayoría de la sociedad forma parte de este grupo heterogéneo y por ello, los políticos suelen dirigirse a la “clase media” en sus discursos, pero poco hacen para evitar su extinción.
Un artículo publicado recientemente en el New York Times presenta una serie de estadísticas contundentes, que demuestran que buena parte de los mexicanos vive en la ilusión de creerse clase media cuando en realidad rozan los límites de la pobreza.
De acuerdo con un sondeo citado en el artículo, el 61% de los mexicanos afirman pertenecer a la clase media, pero en realidad únicamente el 12% de la población pertenece en efecto a dicha categoría, considerando para la medición indicadores estrictamente económicos (nivel salarial, acceso a servicios, etcétera).
El estudio afirma, que existen al menos 43 millones de mexicanos que viven en condición de pobreza moderada pero que creen que son clase media. No lo son, porque para ser clase media está estipulado que deberían ganar 64.000 pesos mensuales para una familia de cuatro integrantes, un nivel salarial al que únicamente llega el 10 por ciento más rico de México.
La misma confusión se da en el sector más adinerado y pudiente del país. Aún tomando como medición el 1 por ciento más rico del país, se encontró que dos terceras partes afirmaban ser de clase media. El mito de que “todos somos clase media” se replica se esta manera en todos los estratos socio-económicos y el malentendido es aprovechado por los políticos para promover el estancamiento y agigantar las desigualdades.
¿En qué afecta esta confusión a México?
Afecta en la toma de decisiones a nivel estructural para que un país progrese o únicamente se llenen los bolsillos unos pocos. Resulta imperioso acabar con la idea de que los ricos representan los intereses de la clase media; hoy en día, la clase media tiene mayores posibilidades de convertirse en pobres que de volverse ricos, sencillamente porque el modelo de negocios en México esta pensado para beneficio de un minúsculo sector.
El mito de que el país tiene una extensa y ancha clase media impide crear una coalición política que cambie una forma de hacer negocios que ha causado que la clase media no crezca. Y que ha concentrado el poder adquisitivo en un puñado de familias.
En efecto, la clase media en México es una ilusión que se desmorona cada día un poco más, a causa de la desigualdad con que se distribuye la riqueza.
Fuente: https://culturafilosofica.com/