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Colección de muñecos con síndrome de Down gana premio a mejor juguete de 2020. Educan y concientizan

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Miniland, la fábrica española que recibió el premio, tiene varias colecciones de muñecos que trabajan temas como el respeto a la diversidad, la tolerancia y la inteligencia emocional, entre otros importantes valores.

Onil, una pequeña ciudad ubicada cerca de Alicante (España), no tiene muchas atracciones que la hagan conocida a nivel mundial, pero dentro de la península ibérica es bastante renombrada: se le conoce como “la cuna de las muñecas y juguetes”.

Y justamente en ese ámbito es que lograron destacar ahora último, ya que la fábrica local de juguetes Miniland —con más de medio siglo de antigüedad en Onil— se ganó el reconocimiento al “Mejor juguete elegido por el jurado del año 2020”.

Miniland

¿Y de qué estamos hablando? De una novedosa colección de muñecos con síndrome de Down, comunidad que históricamente no ha sido representada en los juguetes comerciales.

La colección es parte de la línea Miniland Dolls, la cual la empresa viene desarrollando desde hace un tiempo y que se enfoca en la diversidad. En este caso, el grupo está compuesto por dos muñecos y dos muñecas con síndrome de Down, de los cuales la mitad es caucásica y la otra es negra.

Miniland

Victoria Orruño, directora de marketing de la empresa, comentó que Miniland Dolls siempre está progresando y escuchando las inquietudes de los consumidores, como por ejemplo, al fabricar muñecas caucásicas que tuviesen pelo castaño o pelirrojo en vez del clásico rubio.

“Nos hace muy felices haber conseguido este importante reconocimiento a nivel nacional e internacional, y no podía ser en un mejor momento, ya que estamos en el mes de concientización sobre el síndrome de Down. Es por eso que refuerza nuestro compromiso de facilitar la normalización, el respeto y la integración desde la infancia, y nos alienta a continuar dando visualización a los colectivos que más lo necesitan”.

—Victoria Orruño a El Mundo—
Miniland

Por otra parte, Miniland se ha caracterizado por fabricar juguetes inclusivos y que generan una reflexión en quienes los usan. Por ejemplo, Emotions Buddy es una colección de muñecos con piezas intercambiables que ayudan a formar distintas expresiones faciales, abordando la alegría, el miedo, la tristeza, la ira y el amor.

Un bello reconocimiento a una fábrica de juguetes que no se compró la visión clásica occidental de la Barbie rubia y delgada; Miniland está dando visibilidad a quienes nunca la han tenido, estando al margen de la sociedad.

Miniland

¡Bravo!

Fuente: http://www.upsocl.com/