El personal del bus la acogió y dejó en un refugio. Pero necesita un nuevo hogar con urgencia.
Hace unos días, una perrita se subió sola a un autobús en West Yorkshire, Inglaterra, y tomó asiento. El personal se sorprendió y decidió llevarla hasta la última parada de autobús en el centro de Bradford.
Quienes la vieron, se angustiaron cuando comenzaron a notar que ningún dueño la reclamaba. Incluso preguntaron en perreras, pero no hubo señal.
Una pasajera que vio a la linda perrita en el autobús dijo a Yorkshire Evening Post: “Intentó bajarse del autobús en un momento dado, pero estaba en la carretera principal muy transitada, así que conseguimos que se quedara y alguien se quedó con ella en el autobús antes de que la sacaran en Bradford Interchange».
Como al final del recorrido aún desconocían al dueño, la llevaron a una perrera. Esperaban darle tiempo a su compañero humano para buscarla y reclamarla.
Janet Burrell, de la perrera dijo al periódico local: “Quienquiera que sea su dueño no debe extrañarla tanto, ya han pasado 48 horas. Se subió sola al autobús en Bierley y se quedó hasta que el personal del centro de la ciudad la sacó. Necesitamos un nuevo hogar para ella”.
Por ahora, se desconoce mayor información del caso. Pero el dueño de la perrita sigue sin aparecer. Muchos rescatistas asumen no volverá por ella y que se trata de una historia de abandono. Ella solo necesita un nuevo hogar, con una familia que nunca más la deje sola.
Fuente: http://www.upsocl.com