Si no nos preocupamos, podemos convertirnos en nuestro propio peor enemigo.
Los cambios que está sufriendo el planeta tienen a todo el mundo preocupados. Ya no son solo cosas que puedan ser medidas por los científicos usando sus herramientas avanzadas y conclusiones desde complicadas mediciones. Los veranos están cada vez más cálidos y los inviernos más cortos y secos. Nadie puede negar que en cosa de diez años, hemos visto al clima cambiar de manera drástica. Parte de esto es debido a los cambios que la naturaleza efectúa por sí misma, pero también hay que reconocer y tener en cuenta que las personas hemos tenido una parte importante en forzar la mano de los ecosistemas del planeta tierra.
Lo más preocupante de esto no es solamente el daño que le estamos ocasionando al planeta, sino que el riesgo mortal al que nos estamos sometiendo a nosotros mismos como especie. El planeta no es tan débil como para caer presa de la mano del hombre, pero sí para llegar condiciones en las que no nos será posible vivir una vida digna y sana.
Un enorme estudio publicado en la revista Science, arrojó que la situación de la naturaleza es mucho más drástica de lo que se creía. Los ciclos naturales que mantienen todo el ecosistema funcional se ha visto terriblemente afectado por los cambios que nosotros las personas les hemos forzado a efectuar. Muchos de estos cambios podrían haber sido mitigados si le diéramos más tiempo a la naturaleza para aceptar las variaciones, pero como el efecto del calentamiento global ha ocurrido más que nada en los últimos cincuenta años, la naturaleza ha tenido que trabajar horas extra para intentar estar al día.
La cantidad de contaminantes que hemos lanzado al planeta, además de los cambios que le hemos forzado a la manera en que cosas como el agua fluye o los insectos polinizan las flores, nos han llevado al punto de que la naturaleza simplemente no será capaz de sostener la manera en que la estamos obligando a que nos sostenga. Dejando de lado los daños enormes que le haremos al resto de las especies, también estamos logrando que el mundo sea inhabitable para nosotros.
Casi cinco millones de personas podrían verse afectadas de manera terrible por esta crisis. Algunas personas podrían quedarse sin acceso a la cantidad de alimentos que necesitan, además de una inevitable crisis de agua potable.
Es fácil desesperarse viendo esta información, pro hay que recordar que todo lo que hagamos cuenta. No es necesario estar al frente de un organización para realizar tu aporte al medio ambiente.
Fuente: http://www.upsocl.com